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LA MUJER DE ROJO

"El Beso"

"El Beso" Este poema lo escribi un 10 de Diciembre del 2001, minutos después de haber terminado mi fiesta de egresados. Creo que no importa a quien se lo dedique realmente, ni bajo que situación, ni por que sucedió. Lo verdaderamnete importante acá son los sentimientos, y si no me equivoco, en esa noche de verano, fría y melancólica, sentía algo así.

EL BESO

La noche esta obscura, fría como de invierno.
Sin embargo, la primavera nos depide con nostalgía.
Afuera, el sol, ya quiere salir
Pero la luna, aun nos observa desde lo alto.
La noche está rara, con perfume a amor;
con sabor a beso.
En la sala todavía se escuchan ruidos, risas y voces,
y a lo lejos, suave
quien sabe que melodía.
La noche esta cómplice, de compañera, de testigo.
La noche solo mira, observa,
Y se torna magicamente romántica.
Tu boca, no se como, encontró la mía,
que inexperta y torpe,
se torna idiotamente vulnerable
bajo un beso embriagador.
Beso con sabor a reencuentro,
con sabor a pasión.
Lenguas de fuego
y cuerpos entrelazados.}

Labios inquietos,
y un beso eterno.
La noche está feliz...
Obscura, fría, como de invierno.

4 comentarios

katiuska -

Si que sabes expresar muy bin tus sentimientos,se que nunca me has amado y que tu corazon le pertenece a esa noche fria y melancolica ,ya no importa con quien, como nicuando,solo se que tu corazon no me pertenece,se trata de los sentimientos, te amare por siempre.

Marthiny -

excelente poema... no le falta nada esta deluxe...
entra a la web de un servidor
estoy escribiendo una historia de amor un poco logica

cuidate
y sigue asi

Tabita -

este poema sintetiza en pocas palabras una etapa fundamental de mi vida, creo que es genial y me identifica mucho.

Enmer Osio -

me parece que sin importar las condiciones en que se den las cosas hay momentos que se graban para siempre en nuestro repertorio de sensibilidades, es por eso que estamos en este plano, haciendo quien sabe que y cuantas veces se nos ocurra hasta darnos cuanta que hay algo más allí fuera pero que es indeteniblemente igual al lo que hay dentro de cada uno de nosotros